El día viernes 28 de noviembre ocurrió algo que debo admitir que me afectó profundamente, hasta el punto de casi derramar lágrimas: murió Roberto Gomez Bolaños, mejor conocido como "Chespirito"
Éste ícono del humor latinoamericano llevaba ya un tiempo enfermo, pero ni su vejez ni sus achaques le quitaban la ternura y su buen humor, recuerdo cuando en el año 2011 se creo su cuenta en Twitter, poniendo como primera publicación el conocido "siganme los buenos" que usaba su personaje "El chapulin colorado" y fui una de las primeras personas en seguirlo.
¿Cómo no recordar con amor las tardes que pasé de niña viendo El Chavo? De solo pensar en cómo me reía en compañía de mi abuela, de mi hermana y, de mi abuelo que en paz descanse me entra un sentimiento de nostalgia tal, que quisiera transportarme al pasado a vivir nuevamente esos ratos amenos.
Recomiendo en el nombre del post El Chavo porque, de los shows que salieron de la brillante mente de Chespirito, este fue el que más veía y el que más me gustaba, pero recuerdo que también amaba al Chapulin, y ¿cómo olvidar los cuentos del Dr Chapatin? uy no, si algún día lo llegase a olvidar "me daría cosa"
Este gran y buen hombre hizo reír a muchas generaciones, el gran homenaje que le hicieron en el DF, me hizo un nudo en la garganta, tantas persona que lo querían, y aunque él no sabía en específico cuántas eran, agradecía muy humildemente el cariño gigante que se le manifestaba, no sólo en México, sino en el resto de latinoamérica.
A pesar de que en estos momentos, mientras escribo esto, quiero llorar, me parece que la mejor manera de rendirle honor a Chespirito es riendo, así que les dejo aquí la película de "El Chavo en Acapulco", que recuerdo que siempre la pasaban en época de vacaciones.
Puede que sin querer queriendo en este momento se me escape una lagrimita, pero es que todos deben admitir que también, sin querer queriendo, se ganó un espacio en nuestro corazón.
Hasta entonces... ¡Siganme los buenos!
Mariana Betancourt Castro.
Éste ícono del humor latinoamericano llevaba ya un tiempo enfermo, pero ni su vejez ni sus achaques le quitaban la ternura y su buen humor, recuerdo cuando en el año 2011 se creo su cuenta en Twitter, poniendo como primera publicación el conocido "siganme los buenos" que usaba su personaje "El chapulin colorado" y fui una de las primeras personas en seguirlo.
¿Cómo no recordar con amor las tardes que pasé de niña viendo El Chavo? De solo pensar en cómo me reía en compañía de mi abuela, de mi hermana y, de mi abuelo que en paz descanse me entra un sentimiento de nostalgia tal, que quisiera transportarme al pasado a vivir nuevamente esos ratos amenos.
Recomiendo en el nombre del post El Chavo porque, de los shows que salieron de la brillante mente de Chespirito, este fue el que más veía y el que más me gustaba, pero recuerdo que también amaba al Chapulin, y ¿cómo olvidar los cuentos del Dr Chapatin? uy no, si algún día lo llegase a olvidar "me daría cosa"
Este gran y buen hombre hizo reír a muchas generaciones, el gran homenaje que le hicieron en el DF, me hizo un nudo en la garganta, tantas persona que lo querían, y aunque él no sabía en específico cuántas eran, agradecía muy humildemente el cariño gigante que se le manifestaba, no sólo en México, sino en el resto de latinoamérica.
A pesar de que en estos momentos, mientras escribo esto, quiero llorar, me parece que la mejor manera de rendirle honor a Chespirito es riendo, así que les dejo aquí la película de "El Chavo en Acapulco", que recuerdo que siempre la pasaban en época de vacaciones.
Puede que sin querer queriendo en este momento se me escape una lagrimita, pero es que todos deben admitir que también, sin querer queriendo, se ganó un espacio en nuestro corazón.
Hasta entonces... ¡Siganme los buenos!
Mariana Betancourt Castro.