Recuerdo que para ese entonces tenía 11 años y me creía muy valiente, así que me puse a ver el aro y por alguna extraña razón mi mamá y mi hermanita me acompañaron. Han pasado casi diez años y esa película me sigue dando un terror inexplicable.
Debe ser por el hecho de que la vi muy confiada y los sustos que me di fueron de magnitudes colosales hasta el punto de sacarme lágrimas.
Una mujer está pasando por el divorcio y la indiferencia de su hijo quien al parecer empieza a tener problemas de atención en el colegio, mientras tanto los rumores de un curioso video maldito que hace que mueras a los siete días de verlo hace que las dos historias se mezclen y sean la combinación perfecta para tu peor pesadilla. Un crimen oculto desde hace años, una maldición desatada por la ira de un ser en un principio inocente, la intriga de saber el origen del video y la agonía de cada día que pasa luego de ver el video y recibir una llamada misteriosa que simplemente te dice "Siete días"
El simple hecho de encontrarme escribiendo esto hace que el corazón se me congele y por mis extremidades empiece a circular la adrenalina que me incita a levantarme y correr hasta que el miedo desaparezca.
Las consecuencias de ver esta película fueron que ni mi hermana ni yo dormimos bien esa noche (de hecho, ella se levantó llorando a todo pulmón) y que hasta el simple acto de cerrar los ojos por cinco segundos me hacía temblar de miedo porque sólo recordaba las escalofriantes escenas de la película.
Puede que algunos estén de acuerdo conmigo en que esta película inmediatamente despierta tu sentido de la paranoia y desata en tu corazón una ola de terror, puede que otros la vean como tonta, pero algunas historias nos marcan más a unos que a otros, de igual manera los invito a verla.
Mariana Betancourt Castro.
Una mujer está pasando por el divorcio y la indiferencia de su hijo quien al parecer empieza a tener problemas de atención en el colegio, mientras tanto los rumores de un curioso video maldito que hace que mueras a los siete días de verlo hace que las dos historias se mezclen y sean la combinación perfecta para tu peor pesadilla. Un crimen oculto desde hace años, una maldición desatada por la ira de un ser en un principio inocente, la intriga de saber el origen del video y la agonía de cada día que pasa luego de ver el video y recibir una llamada misteriosa que simplemente te dice "Siete días"
El simple hecho de encontrarme escribiendo esto hace que el corazón se me congele y por mis extremidades empiece a circular la adrenalina que me incita a levantarme y correr hasta que el miedo desaparezca.
Las consecuencias de ver esta película fueron que ni mi hermana ni yo dormimos bien esa noche (de hecho, ella se levantó llorando a todo pulmón) y que hasta el simple acto de cerrar los ojos por cinco segundos me hacía temblar de miedo porque sólo recordaba las escalofriantes escenas de la película.
Puede que algunos estén de acuerdo conmigo en que esta película inmediatamente despierta tu sentido de la paranoia y desata en tu corazón una ola de terror, puede que otros la vean como tonta, pero algunas historias nos marcan más a unos que a otros, de igual manera los invito a verla.
Mariana Betancourt Castro.