¿Qué tan roto tienes que estar por dentro para que se empiece a manifestar en tu exterior? ¿Qué tan monótona tiene que ser tu vida como para que cualquier acción que rompa esa rutina te haga sentir culpable? Pero, al mismo tiempo ¿Tan bien?
Nina es una bailarina de una academia de NY que aún vive con su madre, quien es manipuladora y cada vez que tiene la oportunidad le recuerda que tiró a la basura su carrera como bailarina por tenerla a ella, pero no conforme con eso, la sigue tratando como a una niña de diez años, no le permite salir ni desenvolverse fuera de lo que es la academia, que ya de por si es muy dura y la absorbe casi por completo.
La vida de la joven cambia cuando es seleccionada para la nueva temporada del lago de los cisnes para la cual debe interpretar tanto al blanco (inocente y lleno de gracia) como al negro (lujurioso y sensual) pero por más buena bailarina que ella sea, el director pone su mirada en otra que parece interpretar la danza mejor que Nina. Es partir de ese momento cuando el caos empieza a hacer acto de presencia por el simple hecho de que a medida que pasa el tiempo y el sufrimiento, los sentimientos encontrados y los nervios de Nina se van desarrollando, algo extraño ocurre con ella, algo ha despertado en su interior y no puede detenerlo, y poco a poco está tomando el control de su ser, ella lo siente, y le gusta, pero al mismo tiempo le teme.
Una película oscura, llena de rencor, odio y excesos, que nos hacen reflexionar y preguntarnos ¿Cual es el límite?
Invito abiertamente a que la vean, tengan altas sus expectativas, porque a la hora de evaluarlo, como diría Nina: fue perfecto.
Mariana Betancourt Castro
La vida de la joven cambia cuando es seleccionada para la nueva temporada del lago de los cisnes para la cual debe interpretar tanto al blanco (inocente y lleno de gracia) como al negro (lujurioso y sensual) pero por más buena bailarina que ella sea, el director pone su mirada en otra que parece interpretar la danza mejor que Nina. Es partir de ese momento cuando el caos empieza a hacer acto de presencia por el simple hecho de que a medida que pasa el tiempo y el sufrimiento, los sentimientos encontrados y los nervios de Nina se van desarrollando, algo extraño ocurre con ella, algo ha despertado en su interior y no puede detenerlo, y poco a poco está tomando el control de su ser, ella lo siente, y le gusta, pero al mismo tiempo le teme.
Una película oscura, llena de rencor, odio y excesos, que nos hacen reflexionar y preguntarnos ¿Cual es el límite?
Invito abiertamente a que la vean, tengan altas sus expectativas, porque a la hora de evaluarlo, como diría Nina: fue perfecto.
Mariana Betancourt Castro