Ayer , aprovechando mi último viernes en la mañana libre, hice ejercicio, pero un POP Pílates de alta intensidad tan fuerte que incluso minutos después de haber terminado, pasando aspiradora por los cuartos, me escurrían gotas de sudor por la cara, cosa que hizo que mi abuela se preocupara mucho porque, a pesar que tiene mucha lógica que yo ayude con la limpieza fuerte, a ella no le gusta, se ofende de cierta forma, pero muy amablemente le hice comprender, aspirando y limpiando, que me agrada hacerlo y sentirme útil.
Luego de eso me bañé y desayunamos, me puse contenta porque por fin pude comerme mi añorada arepa con aguacate, comí tanto que se me puso la barriga redonda y tuve que descansar antes de irme a mi casa a hacer la tarea de inglés, la cual fue extremadamente fácil, no un reto como la semana pasada, al terminar, almorcé y me fui a la casa de Valentina, en donde me mostró unos nuevos canales de cocina increíbles, en los cuales hacen unos postres que se ven tan groseramente ricos que de tan sólo verlos siento que ya engordé como diez kilos.
Cómo andaba con la honda de Toradora! nos pusimos a ver unos cuantos capítulos, con los cuales nos volvimos locas de ternura, y también vimos algo que, literal, me dejó asqueada e impresionada, hay un lugar en yonosedonde, en el cual hacen unos moldes un tanto especiales para dar forma a unos chocolates, a ver si adivinan, qué es lo más extraño y asqueroso que pueden imaginar, así es: moldes en forma de ano (sin comentarios)
Papá me llamó con su amoroso "hay comida rica, vente" y luego de cenar esa deliciosa crema de maíz con pedacitos de queso paisa, me puse a ver "El código Da Vinci" con mi hermanita, y caí rendida, lista y lo suficientemente temprano como para levantarme sin sueño para la clase de inglés.
31/01/15
Hoy me levanté demasiado temprano, en verdad, la semana que viene programaré el despertador para las siete de la mañana en lugar de las seis. Me preparé un omelet simple, con jamón y quesito, que comí con pan tostado con la mermelada de piña que preparé hace algún tiempo. Luego de desayunar y bajar a pasear a mi gorda Mulán, mi mamá me llevó al curso, en el que, para no perder la costumbre, me morí de frío. Nos dieron el examen correspondiente a las primeras cuatro unidades, y en resumidas cuentas, nos fuimos un poquito más temprano, lo cual fue ideal, porque D me estaba esperando.
Hoy fue un día de ajustar cuentas, poner los puntos sobre las i, y recuperar un poco lo que teníamos antes, que dejamos escapar un poco con las peleas, y creo que lo logramos, ya que lo pude convencer para que hiciera cosas por él mismo, para organizar mejor su vida y poderle dedicar el tiempo suficiente a todo. Almorzamos juntos, hablamos mucho, practicamos hablar en inglés, me acompañó a comprarme un nuevo par de zapatos en total calzado y un nuevo marcador para usarlo en mi agenda cuando consiga un nuevo trabajo (ley de atracción, te invoco), y por último me acompañó a sacar a pasear a Mulan por segunda vez en el día.
Aparentemente le había picado el bichito de la hiperactividad, porque a D le costó muchísimo seguirle el paso, estaba como una bestia salvaje jalándolo para todas partes, pero fue hermoso poder sentir que en verdad nos queremos todavía, y que queremos reparar el daño que nos hemos hecho mutuamente. Además que me encanta el tiempo que compartimos cuando paseamos a mi perrita, porque a él le encanta y es una manera de complacer a mi bebé y de pasar tiempo con D al mismo tiempo.
Las lecciones más importantes de este día han sido :
Si quieres que algo salga diferente, tienes que hacer algo diferente para que el resultado cambie.
Nos ganamos las cosas en la vida, si nos dan una oportunidad es porque nos la hemos ganado y no debemos desaprovecharla.
A veces los momentos más significativos suelen ser los más simples.
Sin nada más que decir, me despido.
Mariana Betancourt Castro
Luego de eso me bañé y desayunamos, me puse contenta porque por fin pude comerme mi añorada arepa con aguacate, comí tanto que se me puso la barriga redonda y tuve que descansar antes de irme a mi casa a hacer la tarea de inglés, la cual fue extremadamente fácil, no un reto como la semana pasada, al terminar, almorcé y me fui a la casa de Valentina, en donde me mostró unos nuevos canales de cocina increíbles, en los cuales hacen unos postres que se ven tan groseramente ricos que de tan sólo verlos siento que ya engordé como diez kilos.
Cómo andaba con la honda de Toradora! nos pusimos a ver unos cuantos capítulos, con los cuales nos volvimos locas de ternura, y también vimos algo que, literal, me dejó asqueada e impresionada, hay un lugar en yonosedonde, en el cual hacen unos moldes un tanto especiales para dar forma a unos chocolates, a ver si adivinan, qué es lo más extraño y asqueroso que pueden imaginar, así es: moldes en forma de ano (sin comentarios)
Papá me llamó con su amoroso "hay comida rica, vente" y luego de cenar esa deliciosa crema de maíz con pedacitos de queso paisa, me puse a ver "El código Da Vinci" con mi hermanita, y caí rendida, lista y lo suficientemente temprano como para levantarme sin sueño para la clase de inglés.
31/01/15
Hoy me levanté demasiado temprano, en verdad, la semana que viene programaré el despertador para las siete de la mañana en lugar de las seis. Me preparé un omelet simple, con jamón y quesito, que comí con pan tostado con la mermelada de piña que preparé hace algún tiempo. Luego de desayunar y bajar a pasear a mi gorda Mulán, mi mamá me llevó al curso, en el que, para no perder la costumbre, me morí de frío. Nos dieron el examen correspondiente a las primeras cuatro unidades, y en resumidas cuentas, nos fuimos un poquito más temprano, lo cual fue ideal, porque D me estaba esperando.
Hoy fue un día de ajustar cuentas, poner los puntos sobre las i, y recuperar un poco lo que teníamos antes, que dejamos escapar un poco con las peleas, y creo que lo logramos, ya que lo pude convencer para que hiciera cosas por él mismo, para organizar mejor su vida y poderle dedicar el tiempo suficiente a todo. Almorzamos juntos, hablamos mucho, practicamos hablar en inglés, me acompañó a comprarme un nuevo par de zapatos en total calzado y un nuevo marcador para usarlo en mi agenda cuando consiga un nuevo trabajo (ley de atracción, te invoco), y por último me acompañó a sacar a pasear a Mulan por segunda vez en el día.
Aparentemente le había picado el bichito de la hiperactividad, porque a D le costó muchísimo seguirle el paso, estaba como una bestia salvaje jalándolo para todas partes, pero fue hermoso poder sentir que en verdad nos queremos todavía, y que queremos reparar el daño que nos hemos hecho mutuamente. Además que me encanta el tiempo que compartimos cuando paseamos a mi perrita, porque a él le encanta y es una manera de complacer a mi bebé y de pasar tiempo con D al mismo tiempo.
Las lecciones más importantes de este día han sido :
Si quieres que algo salga diferente, tienes que hacer algo diferente para que el resultado cambie.
Nos ganamos las cosas en la vida, si nos dan una oportunidad es porque nos la hemos ganado y no debemos desaprovecharla.
A veces los momentos más significativos suelen ser los más simples.
Sin nada más que decir, me despido.
Mariana Betancourt Castro