Ayer, luego de ir a la universidad, seguir mi rutina diaria, hacer ejercicio, trabajar y hacer unas cuantas cosas de un trabajo de la universidad, llegó D a mi casa.
Bajé, hablamos un rato, le entregué la carta, nos quedamos hablando un rato más, en fin: terminamos.
Me dolió, eso no puedo negarlo, pero no tanto como pensaba, porque ya veníamos teniendo muchísimos problemas desde diciembre, y simplemente ya no podía más, ya no sentía lo mismo y creo que al pasarlo tan mal estos primeros meses del año, cumplí el período de luto antes de terminar la relación, y ahora que terminó me encuentro como en un limbo bastante extraño, porque quedamos en ser amigos, pero hoy miércoles llega y me escribe como si nada.
Cada quien enfrenta el dolor a su manera pero igual fue algo que me dejó muy confundida, o sea, dude, estuvimos juntos por casi dos años, y yo que fui la que te terminé subí a mi casa a llorar como un niño perdido en un centro comercial comiendo galletas de toddy y tomando toddy caliente por una hora en mi cuarto oscuro escuchando One Direction, y tu me hablas hoy como si nada, no se, simplemente no me cuadra.
That's all... no quiero saber más nada de relaciones por un tiempo largo, una piensa que lo que hizo vale aunque sea un tiempito de luto, pero ni 24 horas chico.
Mariana Betancourt Castro.
Bajé, hablamos un rato, le entregué la carta, nos quedamos hablando un rato más, en fin: terminamos.
Me dolió, eso no puedo negarlo, pero no tanto como pensaba, porque ya veníamos teniendo muchísimos problemas desde diciembre, y simplemente ya no podía más, ya no sentía lo mismo y creo que al pasarlo tan mal estos primeros meses del año, cumplí el período de luto antes de terminar la relación, y ahora que terminó me encuentro como en un limbo bastante extraño, porque quedamos en ser amigos, pero hoy miércoles llega y me escribe como si nada.
Cada quien enfrenta el dolor a su manera pero igual fue algo que me dejó muy confundida, o sea, dude, estuvimos juntos por casi dos años, y yo que fui la que te terminé subí a mi casa a llorar como un niño perdido en un centro comercial comiendo galletas de toddy y tomando toddy caliente por una hora en mi cuarto oscuro escuchando One Direction, y tu me hablas hoy como si nada, no se, simplemente no me cuadra.
That's all... no quiero saber más nada de relaciones por un tiempo largo, una piensa que lo que hizo vale aunque sea un tiempito de luto, pero ni 24 horas chico.
Mariana Betancourt Castro.